Los props son objetos o accesorios utilizados por los personajes y actores en una escena de teatro, cine, televisión o videojuegos. Incluye cualquier objeto móvil o portátil excluyendo actores, escenario y vestuario.
Durante el Renacimiento en Europa, las pequeñas compañías de teatro creaban los complementos, armas, muebles y demás objetos necesarios para la dramatización de la obra. Por tanto, se consideraba que éstos eran ‘propiedad de la cooperativa’. Después, pasarían a ser ‘propiedad eventual de quien lo usaba en el escenario’. En cualquier caso, del término’ propiedad’, property, deriva la abreviatura ‘prop’.
Los props mejoran la autenticidad de una escena y ayudan a los actores o personajes a entrar más en su papel. Se convierte así en una parte vital de la producción.
Si pensamos en la circunstancia en que se desarrolla la escena, estos objetos son utilizados para transmitir el momento y lugar en que se sitúa su narrativa. Puede ser el único indicador de la época o el movimiento cultural de una historia.
Por ejemplo, si la localización se centra en la antigua Roma, habrá que documentarse en ese período de tiempo para transmitir esto a la audiencia. De esta manera, activaremos la imaginación de los espectadores.
En cuanto a la atmósfera, los accesorios ayudan a los actores a entrar en su papel.
Para la Creación de Personajes, los props hacen reconocible la personalidad de los mismos. Pensemos, por ejemplo, en el martillo de Thor o la espada láser de Luke Skywalker.
Aquí entra en juego el trabajo de un artista de concepto o concept artist, quien tiene como misión crear ideas o aspectos sobre algo que nunca ha existido o sobre un proyecto documentado en algo que ha existido.
La habilidad del artista para diseñar un objeto desde cualquier ángulo es vital para su desarrollo, tanto para videojuegos, como películas de cine o televisión. La práctica continua en dibujo de objetos, con diferentes estilos y estéticas variadas, es algo que el artista de props sabe que debe mantener al día. Para ello, una vez más, observar de la vida cotidiana e inspirarse en cosas reales se convierte en un hábito. El mundo real, un viaje, un museo… contribuyen a crear una biblioteca visual de nuevas ideas.
El trabajo del diseñador de props es imaginar cómo se ve el objeto desde diferentes ángulos y hacerlo en detalle para que los modeladores pueden crearlo desde cero. Algunos diseñadores de utilería deciden centrarse en un área específica de interés, como el diseño de vehículos o el diseño de armas.
Puede resultar demasiado obvio, pero si te interesa introducirte en este campo, la mejor manera de conseguirlo es practicar. Crear múltiples objetos bien elaborados, te llevará a disponer de un portfolio de diseño de accesorios increíbles. Cuanto más práctica, mayor será la posibilidad de llegar. Eso y mantener una mente curiosa, siempre abierta a captar nuevas ideas.
El Diseño de Props es una opción de aprendizaje que se contempla en nuestros Programas de Ilustración Tradicional, ¿te interesa?. ¡Infórmate!